Mr.X en Amsterdam: día 1

Ya he vuelto!!. Tras unas merecidas vacaciones ya estoy de vuelta en Gijón.
Ahora que tengo un poco de tiempo libre, antes de volver a ponerme 100% con el Proyecto Fin de Carrera, voy a intentar resumir lo que hize, ví y viví en Amsterdam.

Si alguien en un futuro va a viajar a esta ciudad quizá le sirva un poco de utilidad algunos de los consejos que escriba.

Bueno todo comenzó en el aeropuerto de Málaga, sobre las 9:00 ya teniamos todo facturado y esperabamos al embarque del avión, cuya embarque fue finalmente a las 10:20 mas o menos. Las previsiones que ofrecía el aeropuerto no eran muy buenas, dejabamos Málaga a unos muy confortables 25ºC para llegar a Amterdam a unos 15ºC y con previsión de lluvias. Pero bueno esto es algo a lo que cualquiera que tenga como destino Amsterdam en Septiembre tiene que acostumbrarse, y es que Amsterdam tiene un clima no demasiado favorable, eso sí, cuando llueve suelen ser lloviznas rápidas que en unos minutos se terminan.

El vuelo duró unas 2h y 15m y se pasa bastante rápido, a menos que como yo midas un poco mas de lo que los ingenieros de aviones pensaron y te quedes ajustado en el asiento sin posibilidad de movimiento. Ya en el avión me llevé mi primer chasco con el idioma de Shakespeare, no obstante teniendo un nivel normalito de inglés te puedes defender muy bien en Amsterdam.

El aeropuerto de Amsterdam, en Schipol, es cuanto menos ENORME, casi mas parecido a un centro comercial que a un aeropuerto, con sus tiendas de ropa, McDonal.., Bugre King,... Lo bueno es que todo está correctamente señalizado y no tuvimos ningun problemas para recoger las maletas.

La odisea comenzó cuando ya teniamos las maletas y queriamos ir a Amsterdam. Hay que coger un tren que te lleva hasta Central Station en Amsterdam. Tran intentar comunicarme con el oficinista me día los billetes, sobre 3,60 Euros cada uno mas un plus de 1Euro por el servicio en la oficina. EL problema es que no hize algo que a partir de este momento tendría muy encuenta, esto es escuchar atentamente las indicaciones. Y es que el buen oficinista me indicó por donde se accedía a los andenes y el numero del anden al que teniamos que ir, pero en escasos 5 minutos se me olvidó cual era el andén. Y allí estabamos mi compañera de viaje y yo en un andén escogido mas por azar que por conocimiento. Entonces un tren llegó a otro andén y vimos que tenia inscrito Central Station, así que corriendo escaleras para arriba y para abajo para intentar cogerlo antes de que se fuera. Finalmente nuestras horas de gimnasio nos dieron la velocidad necesaria para alcanzar el tren escasos 10 segundos antes de que emprendierá rumbo a Amsterdam.

Bueno al menos la suerte estaba con nosotros. En escasos 15 minutos estabamos en Central Station de Amsterdam tras un par de paradas intermedias del tren.

Central Station, en obras por la nueva linea de metro

Aunque el hotel no estaba demasiado lejos de Central Station decidimos coger un tranvía para llegar a él, sobre todo por no cargar con las maletas. En Amsterdam hay muchas lineas de tranvia que llegan a casi todos los sitios de la ciudad, el precio del tranvía me resultó un poco caro, sobre 2 Euros creo recordar. Eso si si luego va a utilizarlo mas veces se puede comprar un bono de 20 viajes que sale muy bien de precio, este no era nuestro caso que preferiamos patearnos la ciudad de cabo a rabo.

Finalmente llegamos al hotel, Des Arts se llamaba y estaba situado en el centro, a 5 minutos andando de la plaza Dam. La habitación era en el 4º piso, el mas alto, de hecho la habitacion acababa en pico pues formaba el tejado de la casa/hotel. Las escaleras para subir a la habitación eran especialmente empinadas (como en la mayoria de las casas) de hecho cuando hicimos la inscripcion del hotel nos dieron un curso de montañismo.

Habitación del hotel


Hall del hotel

Bueno al menos la habitacón era muy limpia y con baño privado, algo que hay que tener muy en cuenta si se viaja a Amsterdam pues muchos son los hoteles que no cuentan con baño privado en cada habitacion.

Una vez que dejamos las maletas en la habitación ya salimos ha hacer un poco de turismo. Recorrimos la calle Roklin hasta llegar a la plaza Dam, la plaza mas importante y nucleo a partir del cual se desarrolló la ciudad de Amsterdam. En esta plaza se encuentra el palacio real. La plaza impresiona, está llena de turistas. En frente del palacio real se encuentra un monumento en forma de obelisco que recuerda a las victimas de la 2ª guerra mundial, este monumento suele ser el punto de reunion de los jovenes y turistas para comenzar sus salidas.

Mr.X en la plaza Dam


Vista de la calle Damrak desde la plaza Dam, al fondo Central Station


Monumento de los caidos en la 2ª Guerra Mundial

Desde esta plaza nos adentramos hacia el centro intentabamos encontrar el barrio rojo. Esta parte de la ciudad se caracteriza por calles estrechas, muchos canales, muchos bares y coffeshops y un incontable número de establecimientos de comida rápida. Allí es poca la gente que se sienta a comer tranquilamente, aunque gente en los restaurantes siempre hay, la mayoría coge algo de comida rápida y va comiendolo por la calle o en el propio establecimiento.

Calle del centro con su canal a un lado y sus coffeeshops

Tras un giro en una calle y ver una callejuela, donde no entran mas de dos personas en paralelo, llena de gente decidimos entrar en ella a ver que se cocía. Obviamente pronto nos dimos cuenta que esta calle ya pertenecía al barrio rojo al ver a las chicas en sus ventana con sus farolillos rojos en lo alto del cristal. Las chicas van en ropa interior y suelen increpar a los transeuntes para que se acerquen a hablar un ratillo y intentar camelarlos. Las chicas están agrupadas por tipos, digamos que las rubias estan todas en una parte, luego hay negritas en otra, orientales en otro y transexuales en otro... En esta zona tambien se encuentran algunos de los clubs de espectaculos eroticos de la ciudad.

Por otro lado también llama mucho la atención en esta zona el gran numero de coffeeshops, los hay de todo tipo, con musica mas fuerte o con musica mas tranquila, mas oscuros o mas luminosos. Pero algo comun a todos es el olorcillo que se aprecia al pasar cerca de sus puertas.

Tras recorrer todas las calles de esta zona centro llegamos a Central Station y dimos un paseo muy largo por una avenida muy larga que empezaba en Central Station hacia el oeste de la ciudad.

Canal de la zona centro con su barco turistico

Edificio en forma de castillo en la zona centro, cerca del barrio rojo

A eso de la 8 de la tarde ya teniamos algo de hambre de tanto caminar así que volvimos tras nuestros pasos hacia la zona centro nuevamente para tomar algo y cenar. Primero nos fuimos a un bar muy en plan taberna inglesa donde la puerta avisaba de que tenian mas de 60 tipos de cervezas. Tras una refrescante cerveza nos enfrentamos a uno de los establecimientos de comida rapida mas tipicos que había, la cadena FEBO donde comimos una especie de croqueta gigante con una sabor fuerte a especie.

Arco cercano a Central Station en nuestro paseo por la zona Oeste de la ciudad

Luego alguna vueltecilla mas por la parte centro de la ciudad. Y nos volvimos al hotel pronto sobre las 10:30 que el cansancio ya era importante.